Arroz con Pato: Un plato norteño con mucha historia peruana

La comida peruana sigue conquistando los paladares de más personas en todo el mundo. Quien se topa con su increíble sabor y milenaria cultura termina enamorado perdidamente. La variedad de opciones que contiene nuestra gastronomía la coloca en boca de todos. Uno de sus exponentes es el arroz con pato. Este plato guarda gran parte de la historia Chiclayana, su cultura y un sabor inigualable. 

La referencia más antigua de este manjar chiclayano data de 1860 por parte del poeta granadino Próspero Pereyra Gamba. Sin embargo, se cree que su creación va muchos atrás. No se tiene una fecha exacta porque, con la fusión y complejidad de la cocina peruana, esta información es aún difícil de precisar. Lo importante es que una cosa es clara: el pato siempre ha existido en Perú.

El ingrediente principal de este plato es el pato. Muchas culturas prehispánicas ubicadas en Perú consumían esta ave en su vida diaria. En el Museo Arqueológico Nacional Brüning, por ejemplo, pueden verse cerámicas y huacos de patos representados con escuchas, como comida de la élite precolombina. 

Por otro lado, la presencia de otros insumos traídos desde fuera como el limón, la cebolla, el arroz, las lentejas, las espinacas, las habas, el café, entre otros, brindó una oportunidad grande para experimentar la fusión. Se solían preparar banquetes para las autoridades y se combinaba arroz, pato, tubérculos y otras especies para su deleite. Con la inmigración asiática, esta cultura aportó varias de sus técnicas, incluyendo el corte fino característico hoy para la preparación del plato.

Toda la zona norte es hogar de numerosos platillos, como el Arroz con Pato. En esta zona se encuentran la mayoría de plantaciones de arroz. Se cree que para la fecha de 1821, año de nuestra independencia, ya se tenía presencia de este plato, pero no como tal, sino como opciones individuales para comensales. Incluso podía verse estos ingredientes en importantes cenas. La combinación de ingredientes para su aderezo vendrán mucho después.

En Chiclayo, se caracteriza comer este plato con espinacas y culantro en el arroz para darle ese toque de color verde. Existen muchas variaciones en la preparación. Cada quien le añade su sazón y toque particular. Un detalle importante para muchos chiclayanos, por ejemplo, es la cerveza porque despierta un sabor particular en el pato. ¡Cualquiera de sus versiones, presentaciones y recetas caseras dan como resultado uno de los platos más deliciosos de todo el país! ¡A comer!