Perú es uno de los países más resilientes de la región

Desde los años 1800, Perú ha podido recuperarse de las crisis más rápido que otros países de la región. Desde la guerra del Pacífico, en 1880, hasta la crisis financiera del 2009, el Perú ha logrado recuperar su crecimiento en 1 o 2 años. Históricamente, hemos sido un país joven pues, aproximadamente, la mitad de nuestra población tiene menos de 25 años de edad – y el espíritu emprendedor de nuestra gente ha permitido recuperaciones más rápidas, como se muestra en la siguiente figura:

Durante la última década, las fábricas de confecciones peruanas han invertido 2200 millones de dólares en equipamiento para adaptarse a los nuevos requerimientos de nuestros clientes. En paralelo, macroeconómicamente hablando, el Perú ha sido uno de los países más estables de América. Por ejemplo: nuestra inflación durante el  2019 fue del 1,9 % (frente al 2,3 % en EE. UU.) y nuestras reservas internacionales superan los 67,000 millones de dólares – el nivel más alto en la historia. Además, el sol peruano se encuentra entre las monedas más estables del mundo. Por ejemplo: el sol peruano solo perdió 1.3 % de su valor frente al dólar estadounidense desde que comenzaron los conflictos comerciales entre Estados Unidos y China (en junio de 2018).

Durante la crisis del COVID-19, el gobierno peruano emitió 2 paquetes de ayuda (Reactiva I y II) para ayudar a las empresas formales, con su liquidez, durante la pandemia. Incluso durante este difícil contexto, las fábricas de prendas de vestir han seguido invirtiendo en su infraestructura y su gente. Dado que la mayoría de las empresas textiles en Perú son de propiedad familiar, han podido gestionar mejor la crisis de COVID-19 y adaptarse más rápidamente a los nuevos requerimientos del mercado.

En conclusión: contamos con las materias primas, el equipamiento, la integración vertical y, lo más importante, contamos con las personas para lograr que PERÚ TEXTILES se convierta en el nuevo estándar de excelencia en calidad con sostenibilidad.