Junín te presenta sus maravillas gastronómicas
Síguenos en:Google News
A siete horas de Lima, se encuentra una de los departamentos que mezcla de manera perfecta lo mejor de la sierra y la selva; sí, nos referimos a Junín, un destino que no solo enamora por su belleza paisajística y cultural, sino también por su deliciosa gastronomía.
Junín está conformada por nueve provincias, de las cuales dos pertenecen a la Selva Central: Chanchamayo y Satipo, en ellas se pueden saborear platos como el juane, la ensalada chonta o un majestuoso tacacho con cecina.
Las otras siete provincias ubicadas en la sierra no se quedan atrás, basan su comida en el cuy, las papas andinas y el queso; platillos como el cordero al palo, chicharrón colorado o locro de cuy, te sorprenderán desde el primer bocado.
Marca Perú te nombra algunos de los potajes más destacados de esta región:
Cordero al palo
Comenzamos la lista con un platillo que, si bien surgió en Ayacucho, es uno de los potajes más consumidos en Junín. El secreto del delicioso sabor de este potaje se basa en la cocción y su marinado, basado en ají panca, vinagre, sal, pimienta y comino. El cordero es cocinado a las brasas del fuego por un aproximado de 3 a 4 horas, durante este tiempo, se debe ir rociando el marinado para asegurar que la carne quede jugosa.
Yacu chupe o sopa verde
En Junín, las mañanas frías se calman con un buen yacu chupe o sopa verde. Este platillo que nació en el imperio incaico se prepara en base a un caldo de huesos, acompañado de papa, queso, leche y hierbas aromáticas. Se sirve acompañado de cancha serrana.
Locro de cuy
Desde Tarma, llega el nutritivo locro de cuy. Conocido también como jaca rojro, es preparado todos los 29 de setiembre en la fiesta patronal en honor a San Miguel Arcángel de Acobamba. Antiguamente, era de los platos más consumidos por los agricultores, pues brindaba la energía necesaria para la jornada laboral. Para realizar este platillo, es necesario un cuy tierno, ají panca seco, papas, habas, cebollas y ajos.
Chicharrón colorado
Ir a las diversas provincias de Junín y no probar un chicharrón colorado es considerado pecado. Este platillo es muy consumido en las festividades religiosas de la región; y está basado en aderezo y ají colorado, después se agrega el chicharrón de cerdo y se fríe. Se suele servir acompañado de papa y arroz amarillo (a base de palillo).
Huallpa Chupe
Para preparar esta delicia wanka, se necesita primero realizar el aderezo, que lleva ají panca, ajo y comino, el cual es cocinado por dos horas para luego agregarle la cebolla. Luego se cocina el mote con carne de res y hueso de manzana. En otra olla, se va preparando el caldo de gallina y carnero. Una vez mezcladas las preparaciones, se sirven en el siguiente orden: mote, jugo de los caldos, arroz, las carnes y el rocoto como adorno.
Juane
La selva central se hace presente con el juane. Si bien no hay una sola versión de este plato, el original se basa en gallina, arroz, huevo y aceitunas; estos ingredientes son envueltos en hojas de plátano o bijao para ser cocinados por el lapso aproximado de media hora. Se suele servir acompañado de patacones y ají de cocona.
Tacacho con cecina
Es probablemente el plato más representativo de la selva. Parte de su nombre proviene de la palabra quechua “taka chu”, que significa “machacar”, que es lo que se hace para poder obtener el tacacho o masa a base de plátano; éste una vez frito se aplasta y se sirve junto a la cecina, carne ahumada de cerdo. Acompañan este platillo, chorizo regional (carne molida de cerdo) y ají de cocona.
Ensalada de chonta o palmito
Qué rica son las ensaladas, y mejor si son de chonta (fruto de la palmera del mismo nombre). Su preparación es bastante sencilla, se corta la chonta en delgados hilos y se remoja en agua con limón, seguidamente se aliña, se agrega cebolla, sal y pimienta. Cualquier acompañamiento es permitido en esta ensalada.
Inchicapi
Siguiendo con platillos de la selva, llega la popular Inchicapi, deliciosa sopa que tiene su origen en los antiguos pobladores quechuas de Lamas. Para la preparación de este platillo se requiere una gallina criada en corral o chacra, la cual es acompañada con maní licuado, maíz, sacha culantro y yuca. Se suele servir acompañada de ají de cocona o salsa de rocoto. Contiene gran cantidad de calorías y proteínas.
Fuentes: enperu.org/ Diario Correo/ La República/ RPP