Producción de textiles en Perú: ¿Cuáles son sus cinco pilares en sostenibilidad?
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Al centrarse en estas acciones, Perú estaría posicionándose como referente en la producción textil sostenible, respetando tanto el medio ambiente como a las comunidades involucradas.
La industria textil en Perú ha evolucionado significativamente en las últimas décadas, adaptándose a las demandas globales de sostenibilidad, donde no solo se busca proteger el medio ambiente, sino también asegurar que las comunidades y economías locales se beneficien de manera idónea.
En este contexto presentamos las cinco bases fundamentales que se centran en la sostenibilidad y que guían la producción textil en el país.
Fuente: Shutterstock
Energía limpia
La energía limpia en la industria textil se refiere al uso de fuentes de energía y tecnologías eficientes que minimizan el impacto ambiental en la producción. Dado que, tradicionalmente, esta industria trabaja con mucha energía, la transición hacia el uso de energía limpia de fuentes naturales (como la luz solar, el viento, el agua y el calor del planeta) es crucial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, mejorar la eficiencia operativa y promover el desarrollo rural sostenible.
Mínima huella hídrica
La huella hídrica se refiere al volumen total de agua utilizada en todo el proceso de la cadena de valor de una prenda de vestir. Esto abarca desde la extracción de materias primas hasta el acabado y lavado de las prendas. Es por ello que minimizar este elemento es crucial para la sostenibilidad y la preservación de los recursos hídricos, especialmente en áreas donde el agua es un recurso escaso.
Según La Alianza de las Naciones Unidas para la Moda Sostenible, esta industria consume alrededor de 215 billones de litros de agua al año. De esta manera, reducir la huella hídrica en la industria textil es esencial para mitigar el impacto ambiental de la producción de ropa, ya que es uno de los sectores más intensivos en el uso de agua.
Carbono neutral
Hoy en día, se genera una importante cantidad de CO2 para realizar cualquier actividad diaria, por lo que esta producción es más grande de lo que el planeta Tierra pueda manejar. Lograr la neutralidad de carbono en la industria textil es un objetivo que implica reducir y compensar las emisiones de gases de efecto invernadero que se generan con la producción, distribución y consumo de los productos.
De esta manera, una empresa textil, al estar alineada con la neutralización de carbono, debe calcular y hacer un estricto seguimiento de todas las emisiones totales de CO2 que se producen en la cadena de valor, además de disminuir al máximo este impacto en el medio ambiente.
Fuente: Studio Sabático / PROMPERÚ
Producción limpia
La producción limpia en la industria textil se refiere a la implementación de procesos y prácticas que reducen al mínimo el impacto ambiental y promueven la eficiencia en el uso de recursos. Este enfoque busca no solo minimizar la contaminación y el desperdicio, sino también optimizar la productividad y la sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de producción.
Por ejemplo, empresas textiles nacionales ya vienen realizando iniciativas con el tejido SEAQUAL, fibra de poliéster hecha con un porcentaje de los residuos plásticos recuperados de las botellas encontradas en el fondo del mar. De esta manera, se limpia el océano con el objetivo de utilizar material renovable.
Fuente: Shutterstock
Trabajo digno
El trabajo digno en la industria textil es un tema de vital importancia, ya que abarca aspectos fundamentales como condiciones laborales justas, el respeto por los derechos humanos de trabajadores y comunidades, ambientes de trabajo seguros, así como la aplicación de una responsabilidad social corporativa que vincule labores con acciones positivas dentro de la sociedad, como el apoyo a instituciones benéficas.
La industria textil, siendo una de las más grandes a nivel global, tiene un impacto significativo en la economía y en la vida de millones de trabajadores. Garantizar condiciones de trabajo dignas no solo mejora la calidad de vida de los empleados, sino que también contribuye a la sostenibilidad y reputación de las empresas dentro del mercado global.
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