Cinco destinos de película que puedes encontrar en Perú

Impresionantes nevados, desiertos infinitos, un enorme litoral y una de las selvas más exuberantes del planeta. Perú, el país más rico del mundo, no solo ofrece a los visitantes increíbles sitios arqueológicos, también regala hermosos y variados paisajes que harán de cualquier producción audiovisual un homenaje a la fotografía cinematográfica. Y para muestra, esta lista.

Pampachiri

Este impresionante bosque de piedras, a 120 km de la ciudad de Andahuaylas, Apurímac (en el corazón de la serranía peruana) es un imponente atractivo rocoso con pirámides de hasta 10 metros de altura que deslumbran a sus visitantes. Las extrañas figuras de sus formaciones geológicas se asemejan a una futurista aldea de los pitufos.

El Cañón de los Perdidos

En este lugar -de cinematográfico nombre- puedes acercarte a una de las maravillas más impresionantes que ofrece el desierto peruano: a 69 km al sureste de la ciudad de Ica se inicia el camino hacia el Cañón de los Perdidos, un lugar poco conocido en el que formaciones geológicas asombrosas te dejarán sin aliento.

Dunas de Ica

ad de playas y oasis, Ica - y su mágico desierto- es uno de los destinos más importantes de la costa peruana, en el que se pueden encontrar extraordinarias dunas, de todos los tamaños. Como si fuera poco, este impresionante lugar es el escenario de las enigmáticas líneas y geoglifos de Nasca y Palpa, un misterio que sigue intrigando a sus visitantes.

Géiseres de Candarave

Los géiseres son manantiales de agua caliente que, en el caso de los de Candarave, pueden alcanzar hasta los 87°C. El vapor, los colores y los paisajes de apariencia marciana lo hacen un destino de película. Ubicados en la provincia sureña de Tacna, estos fenómenos geológicos son muy extraños, pero también, terapéuticos: los habitantes de la zona han construidos fuentes para que los visitantes puedan aprovechar las propiedades medicinales de sus aguas volcánicas.  

Madre de Dios: la naturaleza en estado puro

Visitar el Parque Nacional de Manu y la Reserva Nacional de Tambopata, en Madre de Dios, es mucho más que conocer un Patrimonio Natural de la Humanidad y una enorme área natural protegida; es exponer los sentidos al trinar de 600 variedades de aves exóticas, deslumbrarse con los estimulantes colores de 1200 tipos de mariposas y descubrir que un solo lugar puede ser el hogar de 100 especies de mamíferos. Y estas son solo algunas de las maravillas que nos ofrece el vasto territorio que conforma la exuberante selva amazónica sur, donde la región de Madre de Dios ostenta orgullosa inmensas reservas naturales, ríos sinuosos y rica vida silvestre.

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