¿Cuáles son los desayunos más representativos del Perú?

La gastronomía peruana deja a todo comensal con el estómago agradecido y contento. Esto aplica para cualquier comida, y el alimento más importante del día no es la excepción.

La tierra de los Incas te ofrece contundentes desayunos, entre los que destacan la mezcla de especias, carnes, los infaltables superfoods, combinados con pan fresco u otra guarnición, los cuales no deben faltar en el inicio de tu día.

A continuación, compartimos una selección de los desayunos peruanos más representativos.

Salchicha huachana. Tal como su nombre lo dice, este potaje regional nació en la ciudad de Huacho, a pocos kilómetros de Lima. En él se emplea carne y grasa de cerdo, la cual es condimentada con semillas de achiote. Este manjar puede consumirse solo o en espectacular combinación con huevo arrebozado. En el norte chico, es pieza estrella del famoso desayuno huachano. Este incluye Tamal (si es de Supe, mucho mejor), Relleno, camote frito y el tradicional Chicharrón. Como complemento, va una olorosa taza de café, perfecta para cerrar el festín. Un secreto: ¿sabes cómo diferenciar la calidad y sabor de la salchicha? Fíjate que, al freírla, su color se torne ligeramente marrón. De ser así, la calidad está garantizada.

Pan con chicharrón. Simplemente, un manjar que deleita y que llena. La magia de su preparación empieza hirviendo el cerdo, y con la grasa que este destila, es llevado al fuego y frito. El resultado es una explosión de sabor que se degusta en crocante pan francés. También se agrega camote frito y salsa de cebolla. El plato marida perfectamente con una taza de café recién pasado. En la sierra, el Chicharrón se disfruta con mote en vez de pan.

Tamal. Es infaltable en el desayuno del domingo. Este pequeño pero generoso potaje tiene como ingrediente estrella el maíz, el cual es procesado y condimentado. Existen diversas preparaciones, según cada región. Mayormente, es posible encontrarlo con el interior relleno de trozos de cerdo (o de pollo), aceituna, huevo y ají. Se disfruta acompañado de salsa de cebolla o, si el hambre apremia, con una ración de pan francés.

Caldo de cabeza. Si nos dirigimos a la sierra, esta presentación es ideal para después de una amanecida. No en vano, en el argot popular, este plato es considerado como el “levantamuertos” oficial de los Andes. Consiste en un contundente fondo, que va acompañado de mote, papas, orégano y sal. Por supuesto, haciendo oda a su nombre, también lleva trozos de carne de cabeza de carnero: todo un deleite para empezar con fuerza la mañana.

Adobo arequipeño. En la Ciudad de la Eterna Primavera, iniciar con un buen Adobo arequipeño es señal de que el día pintará bien. El protagonista de este plato es la chuleta, que pasa por un proceso de maceración y posterior hervido con ají panca. El fondo va elaborado con pimiento, cebolla, rocoto, comino, clavo de olor y sal. ¿Cuál es el secreto del sabor? Eso se guarda celosamente en manos de las tradicionales picanteras que mantienen en vigencia este y otros platos de generación en generación. Aunque es típico en el desayuno, gracias a su oferta gastronómica, hoy se puede disfrutar en cualquier momento del día.

Sangrecita. Una opción bastante económica y muy solicitada por los peruanos es la sangre de pollo condimentada, o simplemente Sangrecita. Aunque no lo parezca, su delicioso sabor y su poder nutricional contra la anemia otorgan a este plato un prestigio importante. La porción es llevada a la mesa con yuca, pero también puedes disfrutarla con pan.

Más variedad

Otros platillos que puedes disfrutar sin culpa del gozo son el Lomo al jugo, la Humita y el Chapo (bebida de plátano dulce machacado, típica de la selva).

Fuentes: Peru.com/ Antigua Taberna Queirolo/ Red Bus